Diferentes estudios coinciden que los hombres piensan en sexo de 7 a 9 veces al día, y hablan de sexo con amigos y hasta desconocidos en restaurantes, el gimnacio.
Cada conversación conduce a diferentes pensamientos y conductas sexuales.
¿Es la iglesia un lugar donde los hombres deberían hablar de sexo?
Por supuesto que sí, y la razón es simple: Dios enseña en la biblia acerca de sexo como un tema espiritual, moral y social que puede llevar a los hombres a una esperiencia de destrucción o verdadero placer.
Hombre, ¡Únete a nosotros! Y HABLEMOS DE SEXO. Cómo fuente de placer dentro del matrimonio, como impulsos que podemos controlar para no meternos en problemas y también hablemos de pornografía como un hábito muy popular en nuestra sociedad, descrubramos si nos trae reales beneficios o nos empuja a consecuencias indeseables.
Tendremos bocadillos, y un ambiente entre amigos.
¡Te esperamos!